Manifestantes vandalizaron y prendieron fuego al Ayuntamiento de Apatzingán, en Michoacán, en repudio por los asesinatos de Bernardo Bravo Manríquez, líder limonero, y Carlos Manzo Rodríguez, alcalde de Uruapan.

Los manifestantes marcharon por diversas calles de la cabecera de Apatzingán, lanzando consignas contra la alcaldesa morenista Fanny Arreola Pichardo; realizaron pintas y destruyeron puertas, ventanas y muebles del ayuntamiento, donde fue colgada una manta con la frase “Fuera Fanny”.

Esta protesta en Apatzingán se suma a los disturbios ocurridos entre domingo y lunes en la ciudad de Morelia, donde decenas ingresaron y vandalizaron el Palacio de Gobierno y el Congreso local, exigiendo justicia por el homicidios de Carlos Manzo.

Los disturbios en Morelia han dejado en los últimos dos días 18 detenidos, ocho fueron puestos a disposición de la Fiscalía General del Estado de Michoacán (FGE).

Bernardo Bravo fue asesinado el 19 de octubre, tras ser obligado a asistir a una reunión con presuntos integrantes del cártel Los Blancos de Troya, una de las organizaciones criminales identificadas como extorsionadoras de productores de limón.

Carlos Manzo, alcalde de Uruapan, fue asesinado, por un sicario que le disparó a quemarropa la noche del sábado 1 de noviembre, en la plaza principal del municipio, mientras se realizaba el tradicional Festival de Velas.